La estructura suspendida

Una de las principales características de la casa es su estructura, 8 pórticos separados 4.50m entre sí que permiten al volumen funcional quedar suspendido de los mismos sin necesidad de otros soportes.

El concepto

La idea del proyecto surge de la premisa de hacer desaparecer la sensación de estar en un lugar comprimido, para alcanzar eso se decide despegar el volumen de los linderos lo suficiente como para dejar ingresar la luz y permitir la ventilación natural en cada sector, teniendo como resultado espacios diáfanos y con vistas laterales al verde que cubre los muros.

La modificabilidad también es un punto a su favor, pues el hecho de no tener elementos estructurales en medio posibilitaría la conversión de la función del espacio sin mucho problema en el futuro.

El programa arquitectónico

Al acceder, amplios escalones de hormigón y un muro verde aledaño enmarcan el recorrido hacia la estancia principal de la casa, integrado por; la cocina, comedor y una amplia sala, donde se percibe la doble altura y la continuidad espacial desde ésta hacia el fondo del terreno que viene acompañado de una sensación de liberación.

La escalera, protagonista de la casa, te conduce a la planta alta, donde una sala secundaria sirve de transición a las áreas íntimas, una habitación en suite, tres habitaciones simples y dos baños.

La conclusión del proyecto, Condiciones no convencionales = Diseño no convencional.